5 cosas que debes saber antes de someterte a una cirugía reconstructiva, tras obesidad mórbida
La obesidad mórbida es un problema de salud en aumento que afecta aproximadamente al 3% de los españoles, según la Seedo (Sociedad Española de la Obesidad). Los pacientes que logran perder el exceso de peso tras sufrir obesidad suelen enfrentarse a problemas de deformidad y exceso de piel en áreas como el abdomen, espalda, piernas, brazos y mamas. Esto ocurre especialmente cuando se ha adelgazado considerablemente en poco tiempo, ya que la piel no recupera su firmeza tan rápidamente.
La práctica diaria de ejercicio físico puede mejorar el aspecto de la piel flácida, pero para obtener los mejores resultados existen diversas cirugías reconstructivas que ayudan a eliminar las deformidades y lograr un cuerpo más tonificado.
¿Qué es la cirugía reconstructiva?
Los procedimientos de cirugía reconstructiva tienen como objetivo restablecer la apariencia normal del cuerpo después de sufrir deformidades por diversas causas: pérdida repentina de peso, embarazos, defectos de nacimiento, quemaduras, accidentes o enfermedades como el cáncer.
El propósito de la cirugía reconstructiva en pacientes que han perdido peso tras sufrir obesidad es adaptar la «piel sobrante» a la nueva figura, mejorando así su aspecto físico. En nuestra Clínica de Cirugía Dres. Sanz & Ayala, estudiamos el caso de cada paciente de manera individualizada para ofrecerle un tratamiento adaptado a sus necesidades y garantizar la obtención de los resultados deseados.
5 cosas que debes saber antes de someterte a una cirugía reconstructiva:
- No es un método para perder peso. Esta cirugía está diseñada para pacientes que desean obtener una piel más firme y tonificada después de adelgazar, por lo que recomendamos perder peso previamente mediante hábitos de vida saludables.
- Para obtener los mejores resultados posibles con esta intervención, es recomendable estar cerca de tu peso ideal. Si no estás seguro de tu peso actual, puedes calcularlo mediante tu IMC (índice de masa corporal). Aunque se pueden obtener resultados razonables incluso con un ligero sobrepeso, lo ideal es que tu IMC esté alrededor de 25.
- Es fundamental haber mantenido un peso estable durante los 3 o 4 meses previos a la intervención, ya que los cambios drásticos de peso pueden afectar negativamente a los resultados de la cirugía.
- Los resultados pueden variar según las características individuales del paciente, como el grado de flacidez de la piel, la cantidad de peso perdido, el peso actual y la capacidad de cicatrización. Todos estos factores son evaluados previamente por el equipo médico para determinar el procedimiento más adecuado para cada caso.
- Debes tener expectativas realistas y para ello es importante consultar tu caso con profesionales que puedan explicarte qué resultados puedes esperar y guiarte a lo largo del proceso.
En la Clínica Sanz y Ayala contamos con más de 25 años de experiencia en cirugía reconstructiva. Puedes concertar una cita previa y nuestro equipo estará encantado de resolver todas tus dudas y ofrecerte las mejores soluciones para tu situación.