Técnicas y metodología de la cirugía reconstructiva en quemaduras

En primer lugar, es importante conocer los diferentes tipos de quemaduras que existen.
Están las de primer, segundo y tercer grado. Las primeras, suelen ser las consideradas menos graves, ya que solo producen un daño superficial al dañar la capa externa de la piel, la epidermis. Éstas no suelen dejar secuelas por lo que no requieren de una intervención.
En las de segundo grado se daña la capa externa de la piel y la que se encuentra debajo. Son conocidas como quemaduras de espesor parcial y pueden ser superficiales o profundas, y suelen tener una pérdida de función de la piel.
Por último, las de tercer grado, son las quemaduras más graves ya que se destruyen la epidermis y la dermis y se llega a dañar el tejido adiposo subcutáneo, los nervios, el músculo e incluso puede llegar a los huesos. Tras esta breve introducción, queremos contarte que en nuestra clínica de cirugía estética en Valladolid trabajamos diferentes técnicas y metodologías para tratarlas.

Cirugía para las quemaduras

Las quemaduras de segundo grado, intermedio y profundas, y las de tercer grado precisan a veces de intervenciones quirúrgicas. La indicación depende de la profundidad, la localización, la extensión y la morfología de las lesiones.
El cirujano procura recuperar esas propiedades mediante una nueva cobertura cutánea que sustituya la piel lesionada. Puede ser de dos maneras: temporal, cuando son apósitos o sustitutivos cutáneos temporales, o mediante la utilización de autoinjertos.
Básicamente, el procedimiento de la cirugía radica en la extirpación de la superficie cutánea quemada y su sustitución por piel sana.
Existen diferentes técnicas de reconstrucción de quemaduras:
– Autoinjerto de piel: es la técnica más utilizada. Consiste en obtener injertos de la piel del paciente, que suelen dejar una pequeña cicatriz (área cicatricial) en la zona de donde se obtienen.
– Sustituto dérmico: es un material que sirve para que el organismo regenere una dermis parecida a la original, que es la importante ya que proporciona elasticidad, resistencia y le da calidad a la piel (el armazón de la piel; el andamiaje). Está desarrollado por la bioingeniería y se utiliza en áreas quemadas con importancia funcional, cosmética y para tratar secuelas de quemaduras.
– Cirugía reconstructiva clásica: en ésta se utilizan colgajos de tejido, que pueden precisar de microcirugía.

Cuidados tras la operación

Se suelen realizar cuidados locales, que consisten en el cuidado de cicatrices, hidratación, cremas que regulen la cicatrización, como es el caso de la rosa mosqueta, las siliconas y la presoterapia.
Si la quemadura es muy profunda, se recomienda realizar una terapia de rehabilitación y fisioterapia para la recuperación funcional y, en algunos casos, física de los pacientes.
Desde nuestra clínica de cirugía estética en Valladolid resolveremos todas las dudas que te surjan al respecto. No dudes en consultarnos, estamos a tu disposición en nuestros diferentes canales.