¿Qué son las malformaciones vasculares?
Se estima que alrededor del 2% de la población española padece malformaciones vasculares. Aunque parezca un porcentaje pequeño, no se le debe restar importancia a esta patología que, si bien es benigna, puede causar problemas al paciente. Desde nuestra clínica, explicamos qué son las malformaciones vasculares, sus tipologías y tratamientos.
Las malformaciones vasculares son lesiones que están presentes desde el nacimiento y que, en ocasiones, no son visibles hasta semanas o años más tarde. Se diferencian de los hemangiomas en que estas no desaparecen e incluso pueden crecer durante toda la vida del paciente. Esta patología puede darse en cualquier recién nacido, sin importar raza o sexo, aunque puede existir una pequeña posibilidad de que sea hereditaria.
¿Qué tipos de malformaciones vasculares existen?
Las malformaciones vasculares son lesiones congénitas constituidas por arterias, venas, capilares o vasos linfáticos. De este modo, existen diferentes tipos dependiendo de dónde se encuentre la lesión. Los principales son:
- Mancha de vino de Oporto: malformación vascular en los capilares, que puede aparecer en cualquier parte del cuerpo. Se caracteriza por ser de color rosa claro al nacer, aunque puede adquirir un tono más oscuro con el tiempo.
- Linfáticas: como el linfangioma o el higroma quístico, que aparecen en la piel del cuello, axila, etc. Son pequeños quistes que crecen conforme el niño crece, principalmente en el cuello, originados por la obstrucción del drenaje de los sacos linfáticos.
- Arteriovenosas: lesiones en el sistema vascular que pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo donde haya venas y arterias.
- Venosas: este tipo podría deberse a errores en el equilibrio de la angiogénesis, proceso que regula el crecimiento y reparación de nuevos vasos sanguíneos a lo largo de la vida.
¿Cuál es el tratamiento de las malformaciones vasculares?
Dado que en muchas ocasiones las malformaciones vasculares no son perceptibles a simple vista, se puede sospechar de su existencia. En estos casos, es común realizar un eco-Doppler para contrastar y estudiar los datos hemodinámicos del paciente. Una vez detectada la existencia de una malformación vascular, existen diferentes tipos de tratamiento dependiendo del tamaño, localización y gravedad de estas.
Los tratamientos más comunes y efectivos son la terapia con láser, ideal para malformaciones vasculares de tipo capilar como las manchas de vino de Oporto. En cuanto a las malformaciones arteriales, su tratamiento consiste en realizar una embolización, es decir, obstruir el flujo sanguíneo hacia la malformación. Respecto a las malformaciones venosas, se utiliza la inyección de una sustancia que obstruye la formación venosa.
Si padeces alguna malformación vascular, no dudes en ponerte en contacto con nosotros, nuestros profesionales te proporcionarán toda la información que necesites y te realizarán una consulta para valorar qué intervención es más adecuada para tu caso.