Fracturas de muñeca, todo lo que necesitas saber

Hoy el Dr. Ayala nos va exponer conceptos claros, precisos y fundamentales que todo paciente debe conocer sobre las fracturas de muñeca (extremidad distal del radio).

Fracturas de muñeca | Causas e incidencia

La fractura de muñeca es la fractura más común en todas las edades y afecta a la extremidad distal del radio y a veces el cúbito. La fractura de muñeca se suele presentar principalmente en 2 picos de edad: personas jóvenes y activas (relacionados con traumatismos de alta energía) y en mayores de 65 años (asociados a mecanismos de baja energía y osteoporosis).

SINTOMAS de la fractura de muñeca

Cuando se produce la fractura de muñeca el paciente va a presentar dolor intenso en relación a la muñeca asociado a la dificultad o imposibilidad de usar la mano, aumentando el dolor con los movimientos de ésta.
En los casos en que la fractura se encuentre desplazada considerablemente se presentará deformidad de la muñeca, generalmente con un aumento de volumen rápido y puede existir además equimosis (hematoma) asociado.
En casi un tercio de los pacientes puede presentarse la sensación de hormigueo o adormecimiento de la mano afectada, lo que se puede explicar por la compresión o daño que se produce a nivel del nervio mediano que se ubica en la zona de la fractura.

Fractura de muñeca | diagnóstico

El estudio básico de una fractura de muñeca se realiza mediante una radiografía de la muñeca en 2 planos o proyecciones. De esta manera se puede comprobar el trazo de la fractura, así como el grado de desplazamiento y afectación articular, buscando también de lesiones asociadas en otros huesos de la muñeca.
En pacientes con afectación articular es conveniente complementar el estudio mediante un TAC o RMN (resonancia) para tener una mejor visión de los trazos articulares para la mejor planificación operatoria. Hay que tener en cuenta que en este tipo de fracturas se suelen asociar lesiones ligamentosas de la muñeca en un 20% de las ocasiones.

Fractura de muñeca | tratamiento

El objetivo del tratamiento de una fractura de muñeca es recuperar el nivel funcional de la mano previo al traumatismo. El tratamiento de la fractura de muñeca puede ser quirúrgico o conservador dependiendo de las características de la fractura, el grado de estabilidad, la edad del paciente y la actividad que realiza. Por ejemplo, en pacientes ancianos de baja actividad, se pueden obtener buenos resultados funcionales a pesar de tener un grado de desplazamiento considerable.
En fracturas de muñeca estables o con poco desplazamiento se puede realizar tratamiento conservador. Se realizará una maniobra de reducción cerrada bajo anestesia y se colocará un yeso o férula braquiopalmar (yeso desde el brazo hasta la mano). Después de la reducción se realiza una radiografía de control para confirmar que la fractura de muñeca esté alineada correctamente. Una vez comprobada la reducción, deberá controlarse semanalmente durante las tres o cuatro primeras semanas para evaluar si se producen nuevos desplazamientos de la fractura, lo que podría implicar la necesidad de una intervención quirúrgica. Transcurrido ese tiempo se retira el yeso o férula y se inicia un período de rehabilitación en donde se busca recuperar la movilidad de la muñeca. La rehabilitación posterior durará entre 1 o 2 meses.

El manejo quirúrgico se reserva para aquellas fracturas de muñeca desplazadas, irreductibles o inestables. En algunos casos se puede realizar un manejo quirúrgico en aquellos pacientes que no estén dispuestos a llevar un tratamiento ortopédico o someterse a un período prolongado de inmovilización porque necesitan una recuperación más temprana. La reducción anatómica de los fragmentos es extremadamente importante para el pronóstico, especialmente en las fracturas intrarticulares.  La reducción abierta más osteosíntesis interna con placa y tornillos es la que obtiene los mejores resultados a corto plazo y largo plazo. La cirugía consiste en realizar una incisión en la cara palmar de la muñeca y manipular la fractura bajo anestesia regional hasta conseguir una reducción perfecta de los fragmentos, estabilizándola después con una placa y tornillos. En caso de fracturas articulares la reducción de la fractura se realiza mediante artroscopia, ya que permite ver directamente el trazo de fractura y corregir los escalones articulares. Además, permite ver y tratar las lesiones ligamentosas y del complejo fibrocartílago triangular, estructuras importantes en la estabilidad de la muñeca.
En cualquier caso, nosotros valoramos y explicamos siempre a los pacientes las diferentes posibilidades de tratamiento, porque cada paciente y sus circunstancias concretas son diferentes.

El mayor avance de los últimos 10 años en cirugía de muñeca: la artroscopia.

Como ya hemos comentado, utilizamos la artroscopia para controlar la reducción anatómica de la fractura de muñeca corrigiendo los escalones articulares. Pero además, otro interesante beneficio de la artroscopia es el siguiente: un 20-25% de las fracturas de muñeca se asocian a lesiones ligamentosas; en estos casos la artroscopia nos permite visualizar perfectamente las lesiones de los ligamentos y tratarlos en ese mismo momento.

¿ Cuánto dura una intervención quirúrgica de fractura de muñeca?

La intervención quirúrgica de fractura de muñeca puede durar entre 45 y 90 minutos en los casos en que utilicemos artroscopia.

El postoperatorio de una fractura de muñeca.

En el postoperatorio inmediato se protegerá la muñeca con una férula de yeso para confort del paciente. Esta férula se retirará periódicamente a partir de la primera semana para realizar los ejercicios de rehabilitación que se hayan planificado para obtener una recuperación eficiente y de manera temprana.

 COMPLICACIONES en las fracturas de muñeca.

La complicación más frecuente es la rigidez de la muñeca; por eso todos los esfuerzos en la rehabilitación se van a centrar en conseguir el mayor rango de movimiento libre de dolor.
Otras complicaciones que pueden presentarse en menor medida son la compresión del nervio mediano (síndrome del túnel carpiano, en un 10% de los casos), el colapso tardío en las fracturas tratadas de manera conservadora y la rotura tendinosa (en un 5% de los casos), principalmente del extensor largo del pulgar.
En conclusión, en el momento actual y con el arsenal de pruebas y tratamientos de que disponemos, las fracturas de muñeca pueden ser tratadas de manera eficaz y con excelentes resultados. Para cualquier duda contacte con nosotros